Hace unos días, nos levantábamos con la noticia, no por esperada menos mala, de las cifras de desempleados, en su mayor parte, debido a la crisis provocada por el coronavirus.

Noticias de este tipo, unidas a unos medios de comunicación, centrados en buscar el sensacionalismo para tener audiencias, y a la atípica situación vivida por la pandemia que venimos sufriendo en los llamados «países desarrollados», está haciendo que el miedo, la incertidumbre y con ello la ansiedad, se expandan, como otro virus, igual de peligroso que el corona.

En nuestra profesión, hablamos a diario con muchas personas, y nos encontramos en todas ellas el mismo comentario «No se que voy a hacer, no se que va a pasar». ¿Te encuentras en la misma situación?

No quiero falsearte la realidad, desde luego, en nuestra generación jamás habíamos vivido algo similar. Sin embargo, el humano tiene que lidiar con la incertidumbre a diario, esa incertidumbre, esa previsión para solucionar posibles problemas, es la que nos ha llevado a evolucionar como especie, por tanto, gracias a los «miedos» nos hemos capacitado y crecido…. hasta que llega algo que nuevamente no esperábamos y trastoca todos nuestros planes.

«Los futuros tienen una forma de caerse a la mitad»

Hace muchos años, el dolor y la incertidumbre al ver mis expectativas no cumplidas, me hizo adoptar un poema, como lema en mi vida, su texto está escrito en las cicatrices de mi alma, y siempre me enseñan algo.

Para que entiendas de qué te hablo, te dejo el texto completo de este poema, mal atribuído a Borges:

Y uno aprende…

Después de un tiempo,
uno aprende la sutil diferencia
entre sostener una mano y encadenar un alma.

Y uno aprende…
que el amor no significa acostarse
y una compañía no significa seguridad.

Y uno empieza aprender…
Que los besos no son contratos
y los regalos no son promesas.

Y uno empieza a aceptar sus derrotas con la cabeza alta y los ojos abiertos.

Y uno aprende…
a construir todos sus caminos en el hoy,
porque el terreno de mañana es demasiado inseguro para planes,
y los futuros tienen una forma de caerse en la mitad
.

Y después de un tiempo uno aprende…
que si es demasiado, hasta el calorcito del sol quema.

Y uno aprende a plantar su propio jardín y decorar su propia alma,
en lugar de esperar a que alguien le traiga flores.

Y uno aprende que realmente puede aguantar,
que uno realmente es fuerte,
que uno realmente vale.

Y uno aprende y aprende…
y con cada adiós uno aprende.

Con el tiempo aprendes que estar con alguien porque te ofrece un buen futuro, significa que tarde o temprano querrás volver a tu pasado.
Con el tiempo aprendes que solo quien es capaz de amarte con tus defectos, sin pretender cambiarte, puede brindarte toda la felicidad que deseas.
Con el tiempo aprendes que si estas al lado de esa persona sólo por acompañar tu soledad, irremediablemente acabarás no deseando volver a verla.

Con el tiempo entiendes que los verdaderos amigos son contados,
y que el que no lucha por ellos, tarde o temprano se verá rodeado solo de amistades falsas.
Con el tiempo también aprendes que las palabras dichas en un momento de ira pueden seguir lastimando a quien heriste, durante toda la vida.
Con el tiempo aprendes que, disculpar, cualquiera lo hace,
pero perdonar es solo de almas grandes.

Con el tiempo te das cuenta de que aunque seas feliz con tus amigos,
algún día llorarás por aquellos que dejaste ir.
Con el tiempo te das cuenta de que cada experiencia vivida con cada persona es irrepetible.
Con el tiempo comprendes que apresurar las cosas o forzarlas a que pasen ocasionará que al final no sea como esperabas.
Con el tiempo te das cuenta de que en realidad lo mejor no era el futuro,
sino el momento que estabas viviendo justo en ese único instante.

Con el tiempo verás que aunque seas feliz con los que están a tu lado,
extrañarás inmensamente a los que ayer estaban contigo y ahora se han marchado.
Y aprendes que hay 3 momentos en la Vida que uno no puede remediar:
La oportunidad que dejaste pasar,
la cita a la que no asististe,
la ofensa que ya pronunciaste.

Con el tiempo también aprendes sobre El dinero… y entonces comprendes que:
Puedes comprarte una Casa, pero no un hogar,
Puedes comprarte una Cama, pero no hacerte Dormir,
Puedes comprarte un Reloj, pero no te dará el Tiempo,
Puedes comprarte un Libro, pero no Conocimiento o lo que necesitas aprender,
Puedes comprarte una Posición, pero no sirve para tener Respeto,
Puedes comprarte Medicinas y pagar la consulta al médico, pero no te da Salud,
Puedes comprarte Sangre, pero no Vida,
Puedes comprarte Sexo, pero no Amor.

Con el tiempo también aprendes que la vida es aquí y ahora,
y que no importa cuantos planes tengas, el mañana no existe y el ayer tampoco.

Con el tiempo aprenderás que intentar perdonar o pedir perdón, decir que amas, decir que extrañas, decir que necesitas, decir que quieres ser amigo, ante una tumba, ya no tiene ningún sentido.

Pero desafortunadamente, todo esto … lo aprendes … sólo con el tiempo. »

(Espero que te guste tanto como a mí, que lo tengo en la pared de mi habitación)

La gran lección que nos deja este bellísimo poema, nos da las claves para manejar la incertidumbre:

Gestiona las expectativas. Considera un regalo de la vida cada cambio necesario. A veces, el camino que creemos que es bueno, no es el mejor, y sólo un cambio brusco te hace encontrar la dirección correcta. Recuerda, al final todo sale bien… y si no sale, es porque no es el final. Esto me lleva a la segunda clave

Persistencia. Tal vez las circunstancias que se viven en determinados momentos, sean difíciles, pero eso no convierte a tu objetivo en imposible. Qué es lo peor que puede pasar? Que se demore un poco más de lo esperado? Recuerda, el éxito es 1% de inspiración y 99% de transpiración. Desarrollar la persistencia es lo que te llevará a conseguir tus metas.

Deshazte de la queja y aléjate de las personas negativas. Nuestro cerebro, siempre alerta, está atento a todos los problemas de alrededor, en su búsqueda de supervivencia. Es por eso que concedemos más atención a las «noticias» negativas, que a las*oportunidades beneficiosas, aunque esas noticias sean «fake news» o «bulos». La globalización y el acceso fácil a la información, como nunca lo hemos tenido antes, hace que también esas intencionadas «malas noticias» nos llenen de miedos e inseguridades. El resultado, es frustración y desaliento, recuerda, se dice que en la NASA tienen la imagen de un abejorro que pone » “Está demostrado que aerodinámicamente que es imposible que el abejorro pueda volar, por su tamaño, su peso, y la forma de su cuerpo. Solo que él no lo sabe.“ No des crédito a quien, sin conocerte, te hace creer que tu no puedes.

Capacítate. Sí, porque no hay nada que obstruya más el camino de tu éxito que la ignorancia. Si para obtener un trabajo que te dé satisfacción, tienes que aprender algo, empieza a moverte. No hacerlo te volverá a dejar en los miedos, en las inseguridades. ¿Qué habilidades necesitas desarrollar?¿Qué tienes que aprender para empezar a construir tu futuro? No vale vivir en la mediocridad y decir: «Oh, tal vez pierda mi trabajo, y entonces.. no sé que será de mi vida», porque… eso no te lleva más que a lamer tus propias heridas sin que hagas nada por recuperarte. Si sabes que estás en una situación en la que tal vez lo que tienes «se cae», empieza a buscar alternativas, (que sean más de dos) y ponte manos a la obra a capacitarte para ellas.

Se polivalente. Anclarte a una sóla opción, te deja sin salida cuando esa opción parezca cerrarse. Busca la forma de aprender cosas, aunque no tengan nada que ver entre ellas. Aprende de Steve Jobs, te recomiendo que veas su extraordinario discurso en la Universidad de Standford (https://youtu.be/AfL8Snrt7J4) Aprende de los grandes!

Encuentra tu vocación. La palabra china para crisis, significa oportunidades. Así es que aprovecha esta vuelta de tuerca del destino, para buscar hacer eso que siempre te propusiste, eso que te gusta y apasiona, y que probablemente, se te dé mejor que a la mayoría de las personas. Con tu deseo, tu habilidad innata y el conocimiento adquirido, llegará el éxito.

Y si te estás planteando una profesión basada en el desarrollo humano y su talento, te proponemos una de las formaciones más completas para construir tu futuro. Pídenos información a través de whatsapp y te mostraremos lo fácil que puede ser, hacer de tu vida una historia de leyenda.

Y recuerda, igual que el coronavirus lo paramos entre todos, la situación incierta que se esfuerzan en dibujarnos nos convierte, también, en responsables. No es el momento de quedarse atrapados en el rincón. No es el momento de recurrir a ansiolíticos para evitar pensar en soluciones. No es el momento de buscar culpables. Es el momento de mover el culo, y aprovechar el gran cambio de paradigmas para dar un salto hacia tu plenitud. El tiempo, es ahora!!!

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